PsicoNexos

Santo Domingo, Dominican Republic
PsicoNexos es una organización sin fines de lucro, adscrita al Instituto de Investigación y Desarrollo Santo Tomás de Aquino (ISTA). Surge en Junio del 2007 con el propósito de impulsar la participación e integración de los estudiantes, profesores, investigadores y allegados al ámbito de la psicología y las ciencias sociales de todas las universidades del país. Psiconexos motiva la integración de la psicología con otras disciplinas: Filosofía, Antropología, Medicina, Cultura y el Arte, entre otras; buscando ser un medio de expresión en pro del restablecimiento del equilibrio biopsicosocial y espiritual que necesitan los seres humanos.

viernes, 23 de noviembre de 2007

SINDROME DE BURN OUT

Burnout


Se trata de un Síndrome clínico descrito en 1974 por Freudemberg, psiquiatra, que trabajaba en una clínica para toxicómanos en Nueva York. Observó que al año de trabajar, la mayoría de los voluntarios sufría una progresiva pérdida de energía, hasta llegar al agotamiento.síntomas de ansiedad y de depresión, así como desmotivación en su trabajo y agresividad con los pacientes.

En las mismas fechas,la psicóloga social Cristina Maslach, estudiando las respuestas emocionales de los profesionales de ayuda, calificó a los afectados de “Sobrecarga emocional” o síndrome del Burnout (quemado.)

Esta autora lo describió como “un síndrome de agotamiento emocional, despersonalización y baja realización personal” que puede ocurrir entre individuos que trabajan con personas.


EL "SINDROME DE BURN OUT" ("quemarse" en el trabajo) EN LOS PROFESIONALES DE LA SALUD

María Isabel Pérez Jáuregui
Dra. en Psicología
Profesora Titular de la Facultad de Psicología y Psicopedagogía, Universidad del Salvador
Dirige un Programa de Capacitación en el desarrollo de recursos de afrontamiento al estrés laboral dirigido a profesionales de la salud en distintos hospitales de alta complejidad de la Ciudad de Buenos Aires.
Autora de: Cuando el estrés laboral se llama burn out ("quemarse" en el trabajo) Causas y estrategias de afrontamiento (2000), Buenos Aires, Universidad Libros.

Son muy significativos los índices epidemiológicos que distintas investigaciones señalan acerca de la morbimortalidad ó aparición de enfermedades a edades cada vez más tempranas en los profesionales de la salud.

Entre sus causas principales podemos mencionar:

El continuo y sostenido contacto con el sufrimiento, el dolor, la muerte.
La caída del valor social de la profesión en nuestro país.
La sobrecarga laboral debida al excesivo número de pacientes, la presencia de patologías cada vez menos reversibles, la carencia de recursos, la presión horaria.
La merma en las retribuciones y estímulos de distinto tipo.
La cada vez más inquietante amenaza de sufrir juicios por mala praxis.
El resolver dilemas éticos resultantes de las nuevas tecnologías.
Se reconocen como factores inherentes a experimentar sufrimiento y estrés laboral:

.La naturaleza de la tarea.
La variable organizacional e institucional.
La variable interpersonal (colegas, familia, amigos, redes de apoyo social).
La variable individual (características del profesional como edad, sexo, experiencia, rasgos de personalidad).
El síndrome de burnout es un tipo específico de estrés laboral. Es padecido por los profesionales de la salud y educadores, los cuales, en su voluntad por adaptarse y responder eficazmente a un exceso en las demandas y presiones laborales, se esfuerzan de un modo intenso y sostenido en el tiempo, con una sobreexigencia y tensión que originan importantes riesgos de contraer enfermedades y afectar negativamente el rendimiento y la calidad del servicio profesional.

Aparece en el comienzo ansiedad, fatiga, irritabilidad - signos por lo general advertidos no por el mismo profesional sino por colegas, familiares ó amigos- para finalmente sufrir burnout, que puede ser leve, moderado, grave y extremo en su potencialidad de llevar a la muerte.

Sintéticamente, las características principales descriptas por Maslach (1981) son:

Cansancio y desgaste emocional, desvitalización, pérdida de energía tanto psíquica como física.
Despersonalización en la relación con los otros (pacientes, colegas) con actitudes de irritabilidad, agresividad, impaciencia, cinismo, suspicacia e intolerancia.
Pérdida del sentimiento de competencia e idoneidad profesional, desmotivación, pérdida de la autoestima laboral, deserción y abandono de tareas.
A estos síntomas se les asocian:

Somatizaciones que van desde trastornos funcionales a lesionales según el grado de avance del problema: trastornos cardiocirculatorios y accidentes cerebrales, depresión, tendencia al suicidio, alcoholismo, adicciones, insomnio, hipertensión arterial, cefaleas, trastornos articulares y musculares, entre los más relevantes.
Por lo señalado se evidencia que el burn out causa limitaciones a las potencialidades y riqueza personal.

Es un estado de no esperanza. Encararlo firme y creativamente permite reencender la llama de la vocación y las potencialidades.

Se hace imprescindible proponer planes de tipo preventivo, de desarrollo y preservación de la salud, o en los casos en que el síndrome ya está presente, tratar de aminorar sus efectos.

Con tal objetivo se encaran programas de capacitación y educación para la salud con el objetivo de desarrollar recursos de afrontamiento a las situaciones de riesgo a contraer burnout, como uno de los recursos idóneos y eficientes que la Psicología Comunitaria puede accionar.

Su afrontamiento se reviste así de un sentido ético y espiritua


Incluye:

Agotamiento emocional, que se refiere a la disminución y pérdida de recursos. emocionales
Despersonalización o deshumanización, consistente en el desarrollo de actitudes negativas, de insensibilidad y de cinismo hacia los receptores de servicio prestado.
Falta de realización personal, con tendencias a evaluar el propio trabajo de forma negativa, con vivencias de insuficiencia profesional y baja autoestima personal
Síntomas físicos de estrés, como cansancio y malestar general.


¿Cómo se desarrolla?


Sábado, 17 de Noviembre de 2007




Burnout


De forma contínua y fluctuante en el tiempo. Según Chernis, el Síndrome se desarrolla en tres fases evolutivas

En la primera, tiene lugar un disbalance entre las demandas y los recursos, es decir se trataría de una situación de estrés psicosocial

En la segunda, se produce un estado de tensión psicofísica

En la tercera, se suceden una serie de cambios conductuales, consecuencia de un afronamiento de tipo defensivo y huidizo, que evita las tareas estresantes y procura el alejamiento personal, por lo que hay una tendencia a tratar a los pacientes de forma distanciada, rutinaria y mecánica, anteponiendo cínicamente la gratificación de la spropias necesidades al servicio que presta.

En general el Síndrome se caracteriza por

Es insidioso:
Se impregna poco a poco, uno no esta libre un día y al siguiente se levanta quemado, va oscilando con intensidad variable dentro de una misma persona ( se sale y se entra).
Con frecuencia es difícil establecer hasta que punto se padece el síndrome o simplemente sufre el desgaste propio de la profesión y donde esta la frontera entre una cosa y la otra.

Se tiende a negar:
Ya que se vive como un fracaso profesional y personal.
Son los compañeros los que primero lo notan ; lo que representa un una baza importante para el diagnostico precoz.

Existe una fase irreversible:
Entre un 5% y 10 % de los médicos , el síndrome adquiere tan virulencia que resulta irreversible y hoy por hoy la única solución es el abandono de la asistencia. En la profesión hay bajas.
Por esta razón merece la pena realizar medidas preventivas ya que con frecuencia el diagnostico precoz es complicado y la diferencia entre un simple desgaste y el síndrome es muy sutil





Burnout


El S. de Bournout es un importante mediador patogénico que daña la salud del médico.

Los problemas emocionales de los médicos han sido con frecuencia ocultados y mal afrontados. Los numerosos estudios revelan, con contundencia, que las tasas del alcoholismo y adicción a drogas, así como los conflictos matrimoniales, transtornos psiquiátricos, depresión y suicidio, son varias veces superiores a las de la población general, Asimismo, las tasas de morbimortalidad por enfermedad cardiovascular, cirrosis hepatica y accidente de trafico son tres veces más altas entre los médicos que en la población general





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01/05/2004






Burnout


La atención al paciente es la primera causa de estrés, asi como la satisfacción laboral. El sufrimiento o estrés interpersonal del profesional se origina por la identificación con la angustia del enfermo y de sus familiares, por la reactivación de sus conflictos propios y la frustación de sus perspectivas diagnósticos-terapéuticas con respecto al padecimiento del enfermo

La edad aunque parece no influir en la aparición del síndrome se considera que puede existir un periodo de sensibilización debido a que habría unos años en los que el profesional sería especialmente vulnerable a éste, siendo estos los primeros añoos de carrera profesional dado que sería el periodo en el que se produce la transición de las expectativas idealistas hacia la practica cotidiana, aprendiándose en este tiempo que tanto las recompensas personales, profesionales y económicas, no son ni las prometidas ni esperada.

Según el sexo seria principalmente las mujeres el grupo más vulnerable, quizá en este caso de los sanitarios por razones diferentes como podríaan ser la doble carga de trabajo que conlleva la practica profesional y la tarea familiar así como la elección de determinadas especialidades profesionales que prolongarían el rol de mujer.

El estado civil, aunque se ha asociado el Síndrome más con las personas que no tienen pareja estable, tampoco hay un acuerdo unánime; parece que las personas solteras tienen mayor cansancio emocional, menor realización personal y mayor despersonalización, que aquellas otras que o bien están casadas o conviven con parejas estables En este mismo orden la existencia o no de hijos hace que estas personas puedan ser más resistentes al síndrome, debido a la tendencia generalmente encontrada en los padres, a ser personas más maduras y estables, y la implicación con la familia y los hijos hace que tengan mayor capacidad para afrontar problemas personales y conflictos emocionales; y ser mas realistas con la ayuda del apoyo familiar.

La turnicidad laboral y el horario laboral de estos profesionales pueden conllevar para algunos autores la presencia del síndrome aunque tampoco existe unanimidad en este criterio; siendo en enfermerÃa donde esta influencia es mayor

Sobre la antiguedad profesional tampoco existe un acuerdo. Algunos autores encuentran una relación positiva con el síndrome manifestada en dos periodos, correspondientes a los dos primeros años de carrera profesional y los mayores de 10 años de experiencia, como los momentos en los que se produce un menor nivel de asociación con el síndrome. Naisberg y Fenning encuentran una relación inversa debido a que los sujetos que más Burnout experimentan acabarían por abandonar su profesión, por lo que los profesionales con más añoos en su trabajo serian los que menos Burnout presentaron y por ello siguen presentes.

Es conocida la relación entre Burnout y sobrecarga laboral en los profesionales asistenciales, de manera que este factor produciría una disminución de la calidad de las prestaciones ofrecidas por estos trabajadores, tanto cualitativa como cuantitativamente . Sin embargo no parece existir una clara relación entre el número de horas de contacto con los pacientes y la aparición de Burnout, si bien si es referida por otros autores.

También el salario ha sido invocado como otro factor que afectaría al desarrollo de Burnout en estos profesionales, aunque no queda claro en la literatura

Siguiendo a Rafael de Pablo podemos distinguir los siguiente nucleos etiológicos:

1. EL FACTOR PERSONAL
Características del médico en particular
2. FACTOR PROFESIONAL
Características específicas de la atención primaria
3. FACTOR EMPRESARIAL
Características de los objetivos , organización que se establecen y de los recursos disponibles.

1. EL FACTOR PERSONAL

Hasta que punto hay un desajusté entre nuestras expectativas y la realidad cotidiana y cual es el grado de adaptación entre esta y aquellas.
Cuando estábamos en la facultad, teníamos unas expectativas sobre que queríamos conseguir en la profesión.
Básicamente teníamos tres tipos de expectativas.
1. Expectativas altruistas: poder ayudar a los que sufren.
2. Expectativas profesionales: ser un profesional competente y ser considerado como tal.
3. Expectativas sociales: Tener un prestigio social y buenos ingresos económicos.
Creo que podía ser interesante analizar brevemente estas expectativas par entender algo mejor la prevalencia del burnout:

Expectativas altruistas:
A priori , cuando comentamos nuestro papel como personas que de forma desinteresada ayudan a la persona que sufre , como única recompensa el gozo de su alivio, pocos lo negarían.
También sería difícilmente discutible a priori, el acompañamiento a las cualidades técnicas, de valores como empatia , ternura, delicadeza, tolerancia ,flexibilidad, respeto... en definitiva de humanismo.
Pero estos valores con frecuencia de forma sutil y no tal sutil entran en dilema con los requerimientos que actualmente se nos exige.
Primero es difícil mantener un equilibrio maduro, entre los aspectos positivos de estas expectativas y sus aspectos neuróticos. No es difícil pasar la barrera de la empatia al paternalismo , del humanismo a la dependencia patológica, de la responsabilidad al perfeccionismo fóbico.
Actualmente se priman de forma intensa el registro de los aspectos técnicos, el ahorro económico, que son plausibles, pero según mi opinión tal como se plantean, con frecuencia entran en colisión con los aspectos humanos. Se observa con frecuencia la peyorización de estos valores, con frases como paternalista, fomento de dependencia , falta de control de la demanda.... .Es frecuente observar que aquellos médicos que priman sus aspectos humanos, se cargan de pacientes ,que a demás suelen venirle de los médicos que lo priman menos ( los pacientes lo tiene mas claro y si que los valoran) , lo que hace que con frecuencia sus registros y ahorros sean menores y a la larga sean penalizados por ello .Parecería pues que el sistema no favorecía estos aspectos humanos , lo que hace caer al profesional en frecuentes contradicciones.

Expectativas profesionales
Sentirse competente:
Este sentimiento se fundamenta en el binomio.
Saber lo que hay que hacer
y poderlo hacer

EL SABER: La formación

La atención primaria es amplísima “ todo lo humano nos interesa”, la oferta informativa es muy amplia pero quizás poco organizada y en la mayoría de las ocasiones fuera de la jornada laboral , esto supone una ampliación encubierta de la jornada y tener que escoger con entre la familia y la profesión, haciéndote sentir culpable hagas lo que hagas.

EL PODERLO HACER: las condiciones laborales
“ somos lo que hacemos diariamente”
Es frecuente que la alta presión asistencial y la burocratización de las consultas, nos impidan aplicar plenamente lo aprendido , con lo que se acaba perdiendo , lo que hace que nos vayamos descapitalizando profesionalmente, reduciendo nuestra capacidad resolutiva y se vea acompañado de una importante frustración y sentimiento de minusvalía.

Expectativas sociales
No hace muchos años el médico era considerado como un profesional de prestigio con una alta consideración social y un importante estatus económico.

Actualmente raro es el día, que no sale en la prensa una noticia de negligencia medica , que nos hace sentir en permanente acoso, con noticias sobre importantes logros médicos que hacen que cotidianamente se nos exijan milagros terapéuticos y muchos profesionales no sanitarios medianamente cualificados supera con creces nuestros ingresos, con una menos responsabilidad. Esto da con frecuencia una sensación de importante “ tomadura de pelo “ con la consiguiente desilusión .La administración nos responsabiliza del aumento del gasto y los usuarios exigen mas al sistema a través de nosotros.¡ no gaste!, ¡ cúreme!¡ no cometa errores!

Con frecuencia nos sentimos perseguidos y mal tratados socialmente.

2. FACTOR PROFESIONAL

“ Características de la atención primaria”
Trato directo y continuado con los pacientes y sus familias:
“ El goteo emocional”
Mayor proximidad al sufrimiento cotidiano.
Mayor implicación emocional.
Familiaridad. Difícil mantener la distancia terapéutica.

Gran variabilidad e incertidumbre diagnostica:
Solapamiento de lo orgánico y lo funcional.
Síntomas inicialmente vagos de enfermedades potencialmente graves.
Paso frecuente de rutinas a dramas.

Campo de actuación muy amplio.
“ todo lo humano nos interesa”
Es fácil tener lagunas de conocimientos.
Puede haber situaciones que no sepamos controlar.

Derivación frecuente al especialista.
“ es fácil considerarse o ser considerado de segunda fila”
Por falta de competencia o de capacidad.
Por una presión asistencial alta.
Excesiva burocratización de nuestras consultas.
“ de gestores del sistema a secretarios del mismo”
La excesiva burocracia nos descapitaliza profesionalmente
disminuyendo nuestra capacidad resolutiva.
Las altas expectativas que se formaron con la reforma de la atención primaria y la creación de los centros de salud, están creando un importante grado de frustración al no verse cumplidas en un grado adecuado.

Dado el aspecto integral de nuestra especialidad, hace que constantemente tengamos que defender su sentido y sus competencias

Por lo que Estamos en permanente encrucijada de definir nuestro papel en el sistema sanitario


3.FACTORES ORGANIZATIVOS EMPRESARIALES

Presión asistencial excesiva Provoca agobios, escaso tiempo de dedicación al paciente y aumento de posibilidad de cometer errores.
Falta de una limitación máxima de la agenda asistencial , tanto en consulta de demanda como en avios a domicilio . No sabes como vas ha terminar el día ni que te vas a encontra
Posibilidad de que se intercalen urgencias no previstas .
Todo esto lleva a una sensación de trabajo en cadena “ lo que te echen” con la consiguiente falta de control sobre tu trabajo( importante fuente de estrés )

Burocratización excesiva

Sin un apoyo especifico de un personal auxiliar
Derivación de burocracia desde la especializada( nosotros les mandamos enfermos que deberíamos atender nosotros, y ellos nos mandan papeles que ellos deberían rellenar).
Estamos perdiendo el tiempo en labores burocráticas, que se nos debería auxiliar y se nos quita este tiempo para resolver problemas a los pacientes, teniendo la sensación de habernos convertidos en los secretarios del sistema ( es decir profesionales de segunda).

Escaso trabajo real de equipo

Después de 15 años todavía sigue sin haber una definición clara ( normatizada) entre los diferentes estamentos no médicos, con lo que al final lo que no se hace, lo tiene que hacer el médico .Este tema ha creado y sigue creando importantes tensiones y gasto intensos de energía, por dejar al voluntarismo y a las buenas intenciones de los componentes del equipo, la solución del reparto de responsabilidades .Es probable que en algunos equipos por la sintonía personal de sus componentes y otras circunstancias, se haya conseguido , pero esta situación es muy frágil e inestable rompiéndose con facilidad al menor conflicto o por el recambio lógico de las personas a lo largo del tiempo.
En equipos muy grandes es fácil que se creen subgrupos , así como también es fácil que se creen subgrupos por horarios creando diferentes corrientes de opinión.
La excesiva presión asistencial no permite la existencia de espacios informales de contacto ( comienzos de jornada, desayuno, final de jornada) entre los componentes del equipo, que fomenten “ una buena atmósfera de grupo”
Todo esto hace que no se tenga un objetivo común, sino múltiples objetivos , con frecuencia enfrentados, lo que provoca discusiones estériles y muy desgastantes , fomentando la competitividad insana ,en lugar de la colaboración para conseguir un objetivo común ( misión fundamental de un equipo de trabajo).

Secular descoordinación con los especialistas

“ Enemistad por desconocimiento”
Desde siempre , no existen espacios comunes de contacto dentro de la jornada laboral tanto de primaria como de especializada, lo que provoca con frecuencia plantearse diferentes objetivos y formas de trabajar, con el consiguiente conflicto en las formas y en los intereses.

Falta de sintonía con las Gerencias

“ Dialogo de sordos”
No hay un acercamiento y sintonía en los objetivos, que resultan ajenos. Parece haber un problema de comunicación.
La evaluación no consigue su principal objetivo , que es la búsqueda de oportunidades de mejora de la calidad asistencial y aportar al profesional ideas y herramientas para la mejora en su quehacer.

Una definición de situación estresante sería aquella que se percibe como indeseable , impredecible e incontrolable.




Burnout

Manifestaciones mentales


Sentimientos de vacío, agotamiento, fracaso, impotencia, baja autoestima y pobre realización personal. Es frecuente apreciar nerviosismo,inquietud, dificultad para la concentración y una baja tolerancia a la frustación, con comportamiento paranoides y/o agresivos hacia los pacientes, compañeros y la propia familia.


Manifestaciones físicas


Cefaleas, insomnio, algias osteomusculares, alteraciones gastrointestinales, taquicardia etc.


Manifestaciones conductuales


Predominio de conductas adictivas y evitativas, consumo aumentado de cafe, alcohol, fármacos y drogas ilegales, absentismo laboral, bajo rendimiento personal, distanciamiento afectivo de los enfermos y compañeros y frecuentes conflictos interpersonales en el ámbito del trabajo y dentro de la propia familia.




Burnout




Si , por medio de cuestionario Maslach, que de forma autoaplicada, mide el desgaste profesional. Se complementa en 10-15 minutos y mide los 3 aspectos del síndrome: Cansancio emocional, despersonalización, realización personal. Se consideran puntaciones bajas , por debajo de 34. Ha sido adaptado en nuestro pais por Moreno, Oliver et al.

El cuestionario mas utilizado en la escala de Maslach de 1986 Esta escala tiene una alta consistencia interna y una fiabilidad cercana al 0,9. Se trata de un cuestionario autoadministrado, constituido por 22 items en forma de afirmaciones, sobre los sentimientos y actitudes del profesional en su trabajo y hacia los pacientes.

ESCALA DE MASLACH

1. Me siento emocionalmente agotado por mi trabajo

2. Me siento cansado al final de la jornada de trabajo

3. Me siento fatigado cuando me levanto por la mañana y tengo que ir a trabajar

4. Comprendo fácilmente como se sienten los pacientes

5. Creo que trato a algunos pacientes como si fueran objetos impersonales

6. Trabajar todo el dia con mucha gente es un esfuerzo

7. Trato muy eficazmente los problemas de los pacientes

8. Me siento "quemado" por mi trabajo

9. Creo que influyo positivamente con mi trabajo en la vida de las personas

10. Me he vuelto mas insensible con la gente desde que ejerzo esta profesión

11. Me preocupa el hecho de que este trabajo me endurezca emocionalmente

12. Me siento muy activo

13. Me siento frustrado en mi trabajo

14. Creo que estoy trabajando demasiado

15. Realmente no me preocupa lo que le ocurre a mis pacientes

16. Trabajar directamente con personas me produce estrés

17. Puedo crear fácilmente una atmósfera relajada con mis pacientes

18. Me siento estimulado después de trabajar con mis pacientes

19. He conseguido muchas cosas útiles en mi profesión

20. Me siento acabado

21. En mi trabajo trato los problemas emocionales con mucha calma

22. Siento que los pacientes me culpan por alguno de sus problemas

Preguntas correspondientes a cada escala:

Cansancio emocional: 1, 2, 3, 6, 8, 13, 14, 16, 20.

Despersonalización: 5, 10, 11, 15, 22.

Realización personal: 4, 7, 9, 12, 17, 18, 19, 21.



Existen tres subescalas bien definidas, que se describen a continuación:



1. Subescala de agotamiento emocional. Consta de 9 preguntas. Valora la vivencia de estar exhausto emocionalmente por las demandas del trabajo. Puntuación máxima 54

2. Subescala de despersonalización. Esta formada por 5 items. Valora el grado en que cada uno reconoce actitudes de frialdad y distanciamiento. Puntuación máxima 30

3. Subescala de realización personal. Se compone de 8 items. Evalúa los sentimientos de autoeficacia y realización personal en el trabajo. Puntuación máxima 48

Estas tres escalas tienen una gran consistencia interna, considerándose el grado de agotamiento como una variable continua con diferentes grados de intensidad,:

0 = Nunca
1 = Pocas veces al año o menos
2 = Una vez al mes o menos
3 = Unas pocas veces al mes o menos
4 = Una vez a la semana
5 = Pocas veces a la semana
6 = Todos los días

Se consideran que las puntuaciones del MBI son bajas entre 1 y 33. Puntuaciones altas en los dos primeros y baja en el tercero definen el síndrome.

Existen pocos estudios de campo en nuestro país sobre el desgaste entre los profesionales sanitarios. En casi todos ellos se llega a la conclusión de que el grado global de desgaste es moderado - elevado, siendo las facetas de cansancio emocional y falta de realización personal las mas afectadas






Burnout


Vamos ha intentar responder la pregunta que inicialmente planteamos , sin duda merece la pena un esfuerzo en la búsqueda de soluciones.

Lógicamente vamos a basarnos en muchos aspecto de lo dicho anteriormente y el planteamiento de la prevención y manejo del burnout lo vamos a realizar desde una triple perspectiva:

· A NIVEL INDIVIDUAL
· A NIVEL DEL EQUIPO
· A NIVEL DE ORGANIZACIÓN-EMPRESA

1. EL TRABAJO PERSONAL

No podemos plantearnos el manejo del burnout sin abordar nuestro propio esquema de ver las cosas, sin una modificación propia de actitudes y aptitudes.
Tendremos que tener un proceso adaptativo entre nuestras expectativas iniciales con la realidad que se nos impone, marcándonos objetivos mas realistas, que nos permitan a pesar de todo mantener una ilusión por mejorar sin caer en el escepticismo.
Se impone un doloroso proceso madurativo en el que vamos aceptando nuestros errores y limitaciones con frecuencia a costa de secuelas y cicatrices en el alma.
Tendremos que aprender a equilibrar los objetivos de una empresa ,( cartera de servicios, adecuación eficiente de los escasos recursos disponibles.. ) , pero sin renunciar a lo mas valioso de nuestra profesión ( los valores humanos ) compatibilizándolo y reforzándolo con lo técnico. Dar al Cesar lo que es del cesar .

Dos puntos importantes:

· Sin duda en neutra profesión el aspecto emocional , querámoslo o no ,seamos conscientes o inconscientes de ello, es fundamental. Tendríamos que aprender a manejar las emociones ,tanto por nuestros pacientes como por nosotros mismos. Formémonos en las emociones.
· En cualquier profesión y mas en medicina , es trascendental equilibrar nuestra áreas vitales : FAMILIA – AMIGOS – AFICIONES - DESCANSO – TRABAJO , evitando a toda costa que la profesión absorba estas.
La familia, los amigos, las aficiones, el descanso, son grandes protectores del burnout

2. EL EQUIPO

Los compañeros de trabajo tiene un papel vital en el burnout:
1. En el diagnostico precoz: son los primeros en darse cuenta ,antes que el propio interesado.

2. Son una importante fuente de apoyo: son quien mejor nos comprenden, ya que pasan por lo mismo.
Por el contrario , cuando las relaciones son malas, contribuyen a una rápida evolución del burnout.
Por todo esto es de vital importancia fomentar una buena atmósfera de trabajo:
· Facilitando espacios comunes no informales dentro de la jornada laboral ( del roce nace el cariño ).
· Fomentando la colaboración y no la competitividad( objetivos comunes).
· Formación de grupos de reflexión de lo emocional , tanto de las relaciones sanitario- pacientes , como los aspectos emocionales de las relaciones interpersonales ( en el aspecto laboral ) dentro del equipo.

3. ORGANIZACIÓN- EMPRESA

A mi entender hay tres conceptos clave tanto para la prevención empresarial del burnout como para la eficacia de la misma.
FORMACIÓN – ORGANIZACIÓN – TIEMPO

Entremos en algunos aspectos:

· Minimizar la sensación de falta de control y de trabajo en cadena en la asistencia:
- Limitando una agenda máxima de trabajo: Sabiendo lo que nos podemos encontrar y tener un ritmo cotidiano de trabajo eficiente.
- Minimizar imprevistos: organizar las urgencias , de tal forma que no interfiera en el trabajo planificado.
- Tiempo mínimo por paciente: ¡10 minutos que menos!
Minimizar la burocracia:
- Gestores si, secretarios no.
- Minimizar y facilitar la burocracia.
- Apoyo de personal auxiliar.
· Coordinación con los especialistas:
- Con espacios comunes libres de asistencia que permitan sesiones conjuntas , comentarios de pacientes , protocolización conjunta de patología prevalerte.
- Marcarse objetivos compartidos.
-· Formación continuada:
- Organizada y adaptada a las necesidades reales.
- Siempre que sea posible dentro de la jornada laboral.
· Acortar distancia con las Gerencias:
- Pacto dialogado sobre objetivos.
- Evaluación con feed-bak constructivo con el profesional.

Dos ideas:

1. Departamentos de medicina preventiva con asesoramiento psicológico para profesionales con síntomas de burnout.
2. Cada 5-7 años de asistencia , liberar al profesional unos meses de la sistencia, para formación continuada reglada: doble objetivo , desintoxicar de asistencia y aumentar su competencia ,lo que aumenta su motivación.

PUNTOS CLAVE EN LA PREVENCIÓN DEL BURNOUT

1. Proceso personal de adaptación de expectativas a a realidad cotidiana.
2. Formación en emociones.
3. Equilibrio de áreas vitales: familia, amigos, aficiones, descanso, trabajo.
4. Fomento de buena atmósfera de equipo: espacios comunes, objetivos comunes.
5. Limitar a un máximo la agenda asistencial ,
6. Tiempo adecuado por paciente: 10 minutos de media como mínimo.
7. Minimizar la burocracia con apoyo de personal auxiliar.
8. Formación continuada reglada, dentro de la jornada laboral
9. Coordinación con la especializada, espacios comunes . objetivos compartidos.
10.Dialogo efectivo con las gerencias.




Burnout


La principal dificultad para el tratamiento es la resistencia de los médicos para admitir ellos mismos problemas emocionales y adoptar el rol del paciente (peores pacientes). Además por ser pacientes especiales, reciben un tratamiento de peor calidad, asi como menos tiempo de seguimiento que los pacientes no sanitarios.


Actualmente se considera una enfermedad profesional. Es responsabilidad compartida, individual, colegial e institucional, la tarea de mejorar las condiciones de trabajo del personal sanitario para realizar la tarea clínica a un nivel óptimo de calidad y de eficiencia. Existe un proyecto programa de ayuda al médico enfermo, canalizado a través del los colegios de médicos.


Los dos métodos terapeuticos más eficaces que se conocen son, las técnicas cogniticvas conductuales y la psicoterapia. Ambas, por su complejidad, precisan del Psiquiatra y psicólogo.


BIBLIOGRAFIA de consulta

Blocher, Donald H. y Biggs, Donald (1983). La Psicología del Counseling en medios comunitarios. Barcelona, Herder.
Buendia, José (1998). Estrés laboral y Salud. Madrid, Biblioteca Nueva.
Costa, M. y López, E. (1990). Salud Comunitaria. Teoría y Práctica. Madrid, Diaz de Santos.
Kelly, James (1992). Psicología Comunitaria, El enfoque ecológico contextualista. Buenos Aires, Centro Editor de América Latina.
Kundera, Milan, (1984). La insoportable levedad del ser. Barcelona, Tusquetes, 13ºed. 2000.
Lazarus, R.S. y Folkman, S. (1986). Estrés y procesos cognitivos. Barcelona, Martinez Roca.
Maslach, C. y Jackson, S.E. (1981). "Burnout in organizational settings." En: Oskamp, S. (ed), Applied Social Psychology Annual, vol.5. Beverly Hills, Sage.
Moreno, Oliver, Pastor (1990). "El Burnout, una forma específica de estrés laboral". En: Carballo, V. E. y Buela, G. (comp.), Manual de Psicología Clínica, Madrid, Siglo XXI.
Pérez Jáuregui, M. I.,(1998). Tesis Doctoral: La construcción auténtica e inauténtica del proyecto de vida laboral. Biblioteca de la Universidad del Salvador.
Pérez Jáuregui, M. I. (2000). Cuando el estrés laboral se llama Burnout (quemarse en el trabajo). Causas y estrategias de afrontamiento. Buenos Aires, Universidad Libros.
Selye, H. (1956). The stress of life. Nueva York, Mc Graw-Hill.

Burn out síndrome de agotamiento profesional




El estilo de vida de este siglo ha gestado nuevas enfermedades relacionadas con el Stress laboral y la Desocupación, una de ellas adquirió la denominación de Burn Out ( quemado ) o síndrome de Tomas.
El síndrome de Tomas lleva su nombre por el personaje de la novela "La insoportable levedad del ser", del director checo Kundera, donde el protagonista "Tomas", era un individuo que había perdido su autoestima, su actitud evidenciaba desánimo, tedio en la labor diaria y ausencia de expectativas de mejoría.
El índice de desocupación en nuestro país toca cifras históricas, pero no solo los sin trabajo sufren las consecuencias de los cambios de la globalización, un alto porcentaje de gente con trabajo sufren enfermedades psicosomáticas causadas por la falta de adaptación a las nuevas reglas del mercado.
El Burn-out es un estado de agotamiento físico, emocional y mental, causado por el involucrarse en situaciones emocionalmente demandantes, durante un tiempo prolongado, ( extraído de Pines and Aronson, 1989)
La feroz competitividad e inseguridad que rigen en el ámbito laboral, las exigencias del medio, los cambios trascendentales en los enfoques de la vida y las costumbres, condicionan un ritmo vertiginoso, que genera angustia, agotamiento emocional, trastornos en los ritmos de alimentación, actividad física y descanso, con dolencias físicas, psíquicas y factores de riesgo que ponen en jaque a la salud de los individuos del nuevo milenio.
El Hombre, como entidad compleja, que puede habituarse a circunstancias adversas, pero al verse superados los procesos de adaptación, se origina un desborde que ocasiona trastornos orgánicos y psicológicos; el individuo superado por sus circunstancias laborales, agotamiento físico y emocional comienza a generar situaciones autodestructivas.
Quienes trabajan en profesiones que se encuentran en íntima relación con el sufrimiento humano (tales como psicoterapeutas, médicos, enfermeros, personal de rescate, etc.) son igualmente vulnerables al desgaste por empatía y al Burn out, dado que la empatía es un recurso importante en el trabajo con poblaciones traumatizadas o sufrientes
La vocación por el trabajo puede ser un arma de doble filo: brinda satisfacción si se crece profesionalmente, pero también puede ocasionar desilusión y apatía si la propia tarea es percibida como intrascendente. En este último caso, el estrés crónico puede producir algunos síntomas como: resistencia a concurrir al trabajo, culpa y pérdida de la autoestima, miradas frecuentes al reloj, pérdida del interés e indiferencia, insomnio, dolores de cabeza, problemas conyugales y familiares, entre otros. Cuando varias de estas señales se combinan, hay que replantearse la forma de trabajar, incluida la extensión de la jornada y la relación con pares y superiores.
Las fuertes presiones a que se ven expuestos muchos profesionales, cuyas caras mas visibles son el empeoramiento de las condiciones laborales, la caída salarial , el aumento de las exigencias por parte de las instituciones y la falta de expectativas de solución, se manifiestan a través de vivencias de vacío existencial y stress prolongado que van minando las defensas y debilitando las técnicas de respuesta.
Al personal jerárquico lo estresa tener que lidiar con responsabilidades que exceden lo que ellos definen como el rol profesional. Esto se acentúa en los jefes de oficina, si bien consideran que la jefatura implica un reconocimiento y ascenso en su carrera, dándoles la posibilidad de ser creativos e introducir cambios, también reciben el embate de los factores humanos del rol, como algo que se aparta de la verdadera función, que sería la atención del trabajo.
Se genera un verdadero estado de agobio y desprotección, donde el oponerse a la estructura del sistema crea la impresión de luchar contra imposibles, en el que cada intento frustrante va debilitando al individuo hasta que este resigna su capacidad de perseverar.
Muchos profesionales en relación de dependencia, en el ámbito estatal o privado, desempeñan tareas en condiciones impropias, con horarios excesivos, inseguridad en el cargo, remuneración insuficiente y carencia de recursos materiales o humanos indispensables para una correcta labor, ellos, integran el universo de personas en riesgo de contraer el síndrome de agotamiento laboral .
Este síndrome es un cuadro polifacético y evolutivo, con un desarrollo histórico de enfermedad, conocido por los médicos desde la década del ’70, puede comenzar con cambios psicológicos que van incrementando su intensidad desde el descontento y la irritabilidad hasta estallidos emocionales, afectando los sistemas físicos y psíquicos fundamentales para la supervivencia del individuo.

Los efectos del Burnout son:
Afecta negativamente la resistencia del trabajador, haciéndolo más susceptible al desgaste por Empatía (Compassion Fatigue).
Favorece la Silencing Response o Respuesta Silenciadora ( Danieli, 1984, Baranowsky 1997) que es la incapacidad para atender a las experiencias de los consultantes, que resultan abrumadoras.
Gradualmente el cuadro se agrava en relación directa a la magnitud del problema, inicialmente los procesos de adaptación protegen al individuo, pero su repetición los agobia y a menudo los agota, generando sentimientos de frustración y conciencia de fracaso, existiendo una relación directa entre la sintomatología , la gravedad y la responsabilidad de la tareas que se realizan.
El concepto mas importante es que el Burn-out es un proceso (más que un estado) y es progresivo (acumulación de contacto intenso con consultantes).
El proceso incluye:
1. Exposición gradual al desgaste laboral
2. Desgaste del idealismo
3. Falta de logros

Los síntomas observados pueden evidenciarse como:
1. Físicos: fatiga, problemas del sueño, dolores de cabeza, impotencia, gastrointestinales, etc.
2. Emocionales: irritabilidad, ansiedad, depresión, desesperanza, etc.
3. Conductuales: agresión, actitud defensiva, cinismo, abuso de sustancias, etc.
4. Relacionados con el trabajo: ausentismo, falta de rendimiento, robos, etc.
5. Interpersonales: pobre comunicación, falta de concentración, aislamiento, etc.

Síntomas:
Baja de la autoestima
Abandono
Melancolia
Tristeza
Neurosis
Psicosis
Ideación de suicidio

Síntomas:
Irritabilidad
Cinismo
Aburrimiento
Perdida del idealismo
Frustración
Incompetencia
Autovaloración negativa

El sentirse usado, menoscabado o exhausto debido a las excesivas demandas de energía, fuerza o recursos personales, crea además intensas repercusiones en la persona y en su medio familiar.
Estados de fatiga o frustración son el resultado de la devoción a una causa , estilo de vida, o relación que fracasó en producir la recompensa esperada.
La progresiva perdida del idealismo, de la energía y el propósito que experimentan muchos profesionales que trabajan ayudando a otras personas son el resultado de sus condiciones de trabajo.
El síndrome de agotamiento, es el último paso en la progresión de múltiples intentos fracasados de manejar y disminuir una variedad de situaciones laborales negativas.
La lista de síntomas psicológicos que puede originar este síndrome es extensa, pudiendo ser leves, moderados, graves o extremos.
Uno de los primero síntomas de carácter leve pero que sirven de primer escalón de alarma es la dificultad para levantarse por la mañana o el cansancio patológico, en un nivel moderado se presenta distanciamiento, irritabilidad, cinismo, fatiga, aburrimiento, progresiva perdida del idealismo que convierten al individuo en emocionalmente exhausto con sentimientos de frustración, incompetencia, culpa y autovaloración negativa.
Los graves se expresan en el abuso de psicofármacos, ausentismo, abuso de alcohol y drogas, entre otros síntomas.
Es la repetición de los factores estresantes lo que conforma el cuadro de crónico, que genera baja de la autoestima, un estado de frustración agobiante con melancolía y tristeza, sentimientos de impotencia, pérdida, fracaso, estados de neurosis, en algunos caso psicosis con angustia y/o depresión e impresión de que la vida no vale la pena, llegando en los casos extremos a ideas francas de suicidio.
Muchos expertos dicen que es una enfermedad de la sociedad moderna, donde el trabajo deja de ser una fuente generadora de bienestar, para transformarse en un causal de desilusión y que es la sociedad quien debe deshacer el camino mal transitado.
El diagnóstico precoz, la terapia médica y psicológica, cambios en la calidad de alimentación y la distribución del tiempo de sueño- trabajo- esparcimiento, permiten revertir muchos cuadros.
Lo más positivo para estos estados es gestionar técnicas de recursos humanos y materiales para humanizar la relación laboral y gratificar al individuo en el sentido amplio del término con lo cual se actuaría previniendo el primer eslabón que encadena a estas dolencias y mejorando la CALIDAD DE VIDA.

Ejercicios para el Cerebro

Autora: Coral Vargas
Estudiante de Psicología Escolar de UNIBE
Los pequeños olvidos que comenzamos a padecer después de determinada edad no afectan nuestra vida pero si nos producen ansiedad. Los neurocientíficos han comprobado que no necesariamente tiene que ser así, que las células se regeneran en el cerebro de los adultos y que, al contrario de lo que se pensaba, la pérdida de memoria no se debe a la edad o a que las neuronas se mueran, sino a la reducción en número y complejidad de las dendritas (ramas de las neuronas) que, a través de la sinapsis, reciben y procesan la información de otras células nerviosas.

Esto sucede por una sencilla razón: falta de uso. Hay vitaminas y medicinas que aumentan la transmisión sináptica y fortalecen la memoria, sin embargo, nada como hacer que nuestro cerebro fabrique su propio alimento: las neurotrofinas.

Las neurotrofinas son moléculas que producen y secretan las células nerviosas, y actúan como alimento para mantenerse saludables tanto a ellas como a las sinapsis. Cuanto más activas estén las células del cerebro, mayor cantidad de neurotrofinas producen; esto genera más conexiones entre las áreas del cerebro.
¿Entonces qué debemos hacer?
Lo que necesitamos es hacer pilates con las neuronas: estirarlas, sorprenderlas, sacarlas de su rutina y presentarles novedades inesperadas y divertidas a través de las emociones, del olfato, la vista, el tacto, el gusto y el oído. Algunos ejemplos de ejercicios que expanden substancialmente las dendritas son:

1. Bañarse con los ojos cerrados.2. Usar la mano no dominante. 3. Lee en voz alta.4. Cambia tus rutas.5. Cambia tus rutinas.6. Cambia las cosas de lugar.7. Aprende algo nuevo.8. Identifica las monedas.9. Cambia el mouse de la
computadora al lado contrario
de donde sueles usarlo.

¿Por qué no abrir la mente y probar estos ejercicios tan sencillos que, de acuerdo a los estudios de Neurobiología del Duke University Medical Center, amplían nuestra memoria? Y si tenemos suerte y funcionan, nunca más volveremos a preguntarnos: ¿Dónde dejé las llaves? ó ¿Dónde dejé los lentes, mi cuaderno de apuntes, lápiz o bolígrafo?

Como Oraba Gandhi:



Mi señor ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes y a no decir mentiras para ganarme el aplauso de los débiles

Si me das fortuna no me quites la razón. Si me das éxito no me quites la humildad. Si me das Humildad no me quites la Dignidad.

Ayúdame siempre a ver la otra cara de la moneda, no me dejes inculpar de traición a los demás por no pensar igual que yo.

Enséñame a querer a la gente como a mi mismo. No me dejes caer en el orgullo si triunfo, ni en la desesperación si fracaso.

Mas bien recuérdame que el fracaso es la experiencia que precede al triunfo.

Enséñame que perdonar es un símbolo de grandeza y que la venganza es señal de bajeza.

Si me quitas el éxito, déjame fuerzas para aprender del fracaso. Si yo ofendiera a la gente, dame valor para disculparme y si la gente me ofende dame valor para perdona.
Señor, si yo me olvido de ti: Nunca te olvides de mí.